El alcalde de Sacedón, harto de tanta injusticia, denuncia el agravio comparativo entre municipios ribereños y levantinos tras conocerse que el Consejo de Ministros ampliará la prórroga del Decreto de Sequía
El Gobierno Central contempla cuarenta millones en infraestructuras para la comarca levantina, mientras no cesa de recortar el presupuesto para las obras de abastecimiento a los municipios ribereños de Entrepeñas y Buendía; unas actuaciones que debían haber terminado en 2014 y se prolongarán, al menos, otros tres años
Francisco Pérez Torrecilla, alcalde de Sacedón y, desde el mes de agosto, nuevo presidente de la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía, se muestra apesadumbrado y lamenta que el Gobierno de España "consienta que haya españoles de primera y segunda, como parecen ser respectivamente los levantinos y los ribereños".
"Le pido al Gobierno del Estado que nos trate de igual forma que trata a los ciudadanos del levante. Pido que se concluyan urgentemente las obras de abastecimiento para poder beber agua; pido que se ejecuten de forma inmediata los programas de desarrollo de esta comarca que tenemos pendientes desde hace años y que, como ocurre en el Levante, se nos subvencione en la misma medida el coste de la materia prima de las industrias y comercios de la comarca ribereña".
El alcalde de Sacedón se pregunta por qué no se aplica en la comarca ribereña un decreto como el de Sequía del Segura, que beneficia a una cuenca que está al 43 por ciento de su capacidad mientras que la ribereña tiene sus embalses al 14'5 por ciento. "No me cabe la menor duda de que si en el Levante falta agua, aquí falta mucha más; máxime cuando tenemos pueblos que han de ser abastecidos con camiones cisterna".
Sólo hace falta darse una vuelta por el desierto que antaño era el Mar de Castilla o echar un vistazo a las fotos que circulan por las redes sociales, denunciando una situación insostenible bajo el hashtag #NoalTrasvaseTajoSegura".
Un recorte de cinco millones de euros
Lamentablemente, mientras se contempla una inversión de cuarenta millones de euros en la comarca levantina, este mismo Gobierno no es capaz de acabar con las obras de abastecimiento para dar de beber a los municipios ribereños de Entrepeñas y Buendía. "Para colmo, después de haber secado nuestros embalses llevándose el agua subvencionada por todos los españoles, ahora los regantes del Levante quieren poner en marcha las desaladoras, construidas también con dinero público, pero claro, quieren que el resto de españoles les subvencionemos el coste del agua desalada; eso no es solidaridad, es vivir a costa de nuestra supervivencia".
Y es que, conviene recordar que las obras para el abastecimiento de los veintidós municipios ribereños tendrían que haber acabado en diciembre de 2014, pero los continuos recortes del Gobierno Central han provocado que no puedan estar listas al menos hasta dentro de tres años, si no más. "En Murcia se invierten cuarenta millones de euros con los embalses al 43 por ciento, mientras que aquí nos recortan cinco millones en el presupuesto para 2016, en unas obras que tienen que servir para dar de beber a personas, seres humanos que viven en municipios que han de ser abastecidos con camiones cisterna".
Como acto de protesta, los veintidós municipios pertenecientes a la Asociación se concentrarán el próximo 26 de septiembre, sábado, a las doce de la mañana en la plaza de la Constitución de Sacedón; coincidiendo así con otra serie de concentraciones simultáneas que se llevarán a cabo a lo largo de toda la cuenca del río Tajo.